Un mes por aquí

Ya llevo un mes en Berlín! el tiempo pasa volando...

La cosa va mucho mejor, mejor en el curro, la ciudad es más mia, más comunicada con el mundo exterior que tanto echo de menos gracias a que ya tengo internet y teléfono en casa y con más vida social, que era de las cosas que más necesitaba, un poco más de contacto humano y menos exprimir el cerebro.

Este finde nos fuimos a Leipzig, estuvo muy bien, buen tiempo, buenos amigos, buena comida y aunque bastante familiar también políticamente hablando, por fin un poco de marchitaaaaaaaaaaaaa, en la Moritz Bastei, uno de los clubs de estudiantes más grandes de europa.

A la vuelta Sebastian volvió a sorprenderme nuevamente... Es increibe, estos alemanes pueden llevar absolutamente de todo en sus bicis! Hace dos semanas, además de su mochila cargó con 3 estanterias empaquetadas del Ikea que pesaban un huevo y medio en una especie de carrito improvisado (el de la foto no, que es apañado,pero sí se ve uno de los paquetes-estantería). Ayer: una mochila, un maletón enorme que pesaba unos 25 kgs arrastrando de la parte de atrás y entre la mano y el manillar unas maderas de 2 metros de largo para construir nuestra cama. Pero lo que fué ya increible fué el día que llevo un horno......... sí, sí, un horno en la bici!!!

En fin, que soy una Lila, y mientras él llevaba todo eso, yo sólo una mochila, e iba a su lado para darle ánimos... que desde el día que me caí dos veces intentando llevar una maletilla enana buscamos metas más alcanzables para mi... (es que en una de las caidas casi me como un taxi!) pero bueno, mejoro día a día, y a final del año seguro que soy capaz de llevar tres o cuatro cajas de mudanza más el armario de una sola vez ;).

Esta foto no refleja para nada su habilidad, látima no haberle pillado en uno de sus mejores momentos, pero seguro que habrá otra ocasión!